El mito vasco en Antioquia. Frases sobre los vínculos inexorables entre vascos y antioqueños producidas entre finales del siglo XIX y principios del XX.
Un viajero de origen vascongado, religioso de la Compañía de Jesús que visitó a Antioquia, y por cierto doctísimo en ciencias físicas, el RP Zabala, en una instructiva conferencia sobre Agricultura expresó la simpatía que le inspiraba el pueblo antioqueño, no sólo por la semejanza del suelo profundamente accidentado de estas montañas con las de Cantabria, sino también por la de las costumnares de los campesinos, los cortijos, los cultivos, las casitas blancas que observaba desde lejos, situadas en las eminencias de las cordilleras y sus ramificaciones, el espíritu hospitalario de los habitantes y su afición a adquirir medios de fortuna suficientes para asegurar la independencia individual.
Estanislao Gómez Barrientos, Medellín, 1923
Un viajero de origen vascongado, religioso de la Compañía de Jesús que visitó a Antioquia, y por cierto doctísimo en ciencias físicas, el RP Zabala, en una instructiva conferencia sobre Agricultura expresó la simpatía que le inspiraba el pueblo antioqueño, no sólo por la semejanza del suelo profundamente accidentado de estas montañas con las de Cantabria, sino también por la de las costumnares de los campesinos, los cortijos, los cultivos, las casitas blancas que observaba desde lejos, situadas en las eminencias de las cordilleras y sus ramificaciones, el espíritu hospitalario de los habitantes y su afición a adquirir medios de fortuna suficientes para asegurar la independencia individual.
Estanislao Gómez Barrientos, Medellín, 1923
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